Si ya hubieras construido tu proyecto más importante, probablemente no estarías leyendo esto.

¿Imaginas lo que sería proyectar sin que el técnico municipal y las 2138 normativas interfieran en tu camino?

¿Sin que el cliente se otorgue el derecho de cambiar hoy las ventanas y composición del alzado y a la semana siguiente hacer la cocina más grande?

¿Sin sentir que tienes capacidad y conocimiento para más pero vives atrapado en la prisión de la burocracia?

Todavía está a tu alcance disfrutar proyectando.

Déjame que te cuente algo primero.

Diría que por culpa de haber estudiado los negocios desde el mundo digital y no desde un rancio MBA, me di cuenta de algo.

El mundo digital avanza veloz. Lo que hace que los negocios cambien de tácticas y estrategias una y otra vez. De manera rápida y flexibile.

No son necesarias grandes oficinas, ni equipos, ni socios, ni, en muchos casos, capital inicial.

Esos ingredientes hicieron que decidiera montar mi primer negocio, online. Da igual, hoy el mundo es anfibio y combina constantemente online con offline. Se fue a la mierda casi sin llegar a ver la luz. Hicimos muchas cosas mal.

El siguiente fue mejor, aunque también cometí muchos errores que luego fui tratando de arreglar. Ese sigue vivo.

En ese proceso me di cuenta de que:

construir un negocio es como desarrollar un proyecto de arquitectura.

Solo que con menos normativas, plazos más cortos para empezar a ver resultados y más libertad creativa.

Sí, creativa. En un negocio puedes, incluso debes, llegar a ser creativo.

Así que, me enganché a ese rollo.

Entonces sonaba genial no solo hacerlo para mí sino poder ayudar a otros a hacerlo con el suyo. Pasarme todo el día proyectando con más libertad y sin límite de creatividad.

Dejé la arquitectura para saltar a la consultoría.

Imagínate sentado en tu despacho mirando tu negocio como cuando miras la planta de una vivienda. Percibiendo las relaciones de todas las piezas que hay ahí dentro.

Para acabar frunciendo el ceño y decir “cómo no había visto esto antes”.

Entender qué te está haciendo aceptar clientes que realmente no te interesan y a los que vendes demasiado barato. O saber qué deberías hacer para sentir más control y no que el día pase sin parar pero con sensación de no avanzar.

Me extrañaría que no estuvieras dispuesto a aprovechar la oportunidad de proyectar que tú mismo has abierto.

A proyectar sin 2138 normativas, tomando tú las decisiones y desplegando todas tus capacidades sin límite.

Te hablo de construir tu negocio.

Incluso aunque detestes el mundo de los negocios, ni en un concurso de arquitectura tienes la oportunidad de crear y probar tanto. Ni los buenos negocios llegan con el primer movimiento, ni los buenos proyectos en el primer croquis.

Me da igual si tienes o no contactos, más o menos años de experiencia, trabajas desde una habitación pequeña o unas oficinas de dos plantas.

Hoy en día la tecnología iguala oportunidades.

Y sí, la tecnología es igualmente aplicable al sector de la arquitectura como lo es en todos los otros sectores.

Abordemos una limitación importante:

querer entender o no cómo funcionan los negocios.

Cuando no entiendes cómo están operando los elementos, podrías tomar cada decisión tirando una moneda al aire. El resultado sería similar a pensar 3 horas en un mar de desconocimiento.

En ese segundo caso, vivirías la angustia de hacer demasiados esfuerzos para los resultados que estás obteniendo. Así es normal tener ganas de tirar la toalla o pensar que igual te equivocaste de carrera.

Tus posibilidades cambian cuando empiezas a adquirir la visión y mentalidad que te hace detectar el error en el proyecto. Empiezas a mirar diferente, a operar diferente.

Por eso te traigo un filtro, un tamiz, una paleta de interpretación. Una manera de empezar a mirar tu negocio desde otra perspectiva.

Un producto en formato audio con los 5 pilares a aplicar en un negocio de arquitectura.

Donde verás cosas como:

Seamos serios.

Habrá arquitectos que sigan diciéndose que cuando construyan suficiente sus proyectos hablaran por ellos.

Suponiendo que esa solución fuera cierta, llevaría mucho tiempo construir tal número de edificios que impacten en suficientes posibles clientes. Lo que aún así, no garantiza un negocio rentable. Solo que tienes clientes.

Otros tienen la suerte, o desgracia, de partir de una red de contactos heredada. Aunque lo mismo entre esos contactos no están los clientes que querrían. Ni saben igualmente operar el negocio.

Pero vale, tienen clientes de fácil acceso. Eso es todo.

Eso solo cambia que tu camino no será ese, sino otro. Igual que hay gente con más y con menos talento. Me es indiferente.

Toni Peña llegó a ser la tercera mejor marca de España en maratón, dice que él tuvo que suplir su falta de talento a base de más entrenamiento.

Eso nos pone en una situación difícil de sobrellevar, que haya maneras de conseguir un negocio de arquitectura rentable sin esperar a cumplir los 60 años. Eso solo significaría vivir con el remordimiento de conciencia de haber pasado todos estos años sin hacerlo.

Te hablo de cambiar la manera de leer e interpretar las piezas.

He visto con mis clientes que eso afecta luego a la manera de actuar.

Y lo mejor.

Cualquier pequeño cambio de mentalidad que te lleves, es para toda la vida, tuya y de tu negocio.

Hay clientes que, en consultoría, me han expresado ese cambio de mirada diciendo cosas como:

Cuando personas que han pasado por escuelas de arquitectura con programas educativos similares llegan al acabo del tiempo a situaciones muy diferentes, no es por los conocimientos que se llevaron de la universidad.

Si no no habría estudios de arquitectura a los que les va muy bien y a otros mal.

5 pilares para un negocio de arquitectura – 45€

Pago seguro con tarjeta bancaria.

¿Qué te llevas con este producto?

Ahora bien.

Es evidente que este producto no va a provocar que tu facturación se duplique el próximo trimestre. Si no sería demasiado fácil hacer negocios y todo el mundo tendría su propio negocio.

Lo que te estoy proponiendo es una manera de enfocar diferente lo que haces cada día. De que poco a poco esas horas de trabajo cojan el rumbo para ir impulsando tu negocio. En un camino continuo en el que tendrás tropiezos.

Lo bueno es que serás más capaz de verlos e ir aprendiendo de ellos. Entonces la consecuencia lógica es que tu crecimiento sea más rápido de lo que lo es ahora.

Se trata en cualquier caso de que sea cual sea tu situación y circunstancias, tengas el enfoque correcto para sacarle más partido.

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Preguntas frecuentes

¿Cuándo y cómo recibo el producto?

Inmediatamente después tras realizar el pago recibirás el primer email con acceso al audio de introducción. Pocos minutos después el pilar número 1.

Después de eso, en los siguientes días, irás recibiendo a la misma hora que el primer email, un siguiente email con acceso a un nuevo audio.

¿Cuánto tiempo tengo para escuchar los audios?

Mínimo te garantizo que tendrás acceso durante un año. Durante ese tiempo, puedes escucharlo tantas veces como quieras.

¿Vale para mi caso?

Vale para cualquier persona que esté al frente de un negocio en el sector de la arquitectura y construcción. Tengas o no equipo, seas arquitecto, interiorista o arquitecto técnico.

Eso sí, algo de tiempo necesitas para escuchar los audios, unos 20 minutos por audio.

También te digo que si escuchas y no haces ni caso, no te servirá de mucho. Se trata de que adquieras conocimientos que luego en el día a día vayas integrando en tu negocio. Así que igual te interesa dedicar un poco más de tiempo a cuestionar y hacer tus propias reflexiones. Si no, lo mismo puedes ahorrarte comprarlo.

¿Cuáles son las formas de pago?

Compras online mediante tarjeta bancaria. La pasarela de pago que uso es Stripe, con pago seguro online.

¿Podré preguntar dudas particulares sobre mi negocio?

No, las dudas las puedes plantear sobre los conceptos de los audios y de ahí ver cómo llevártelo a tu negocio. No conozco tu negocio y es muy arriesgado que te dé una respuesta tan específica como daría en una consultoría a medida.

Esas preguntas las podrás plantear vía email durante los 45 días posteriores al día en que hiciste la compra. Yo misma te responderé, no lo hará ningún becario.

Me parece poca cosa para el precio que tiene.

Si consideras que cuanto más tiempo y esfuerzo inviertes en hacer algo mejor será el resultado, suerte con ello. Si ese es el caso, mejor no lo compres.

¿Existe algún tipo de garantía de devolución?

No.

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